Ya he comprobado (estaba casi seguro, pero por si acaso) que no le une parentesco alguno con Robbie Keane, otro enorme irlandés aunque de una «generación» posterior, por así decirlo. Una de las mayores cantadas de un experto en la materia como Fabian Barthez, nunca un portero tan mediocre alcanzó tan altas cotas en su carrera (tanto en el campo como fuera de él, y si no que le pregunten a Linda Evangelista jejeje).