Desde la entidad, propiedad de Ronaldo Nazario, añadieron que el nuevo emblema es “una vuelta a los orígenes” y que la identidad visual se acerca a la del escudo original de 1928. El cambio provocó manifestaciones en los aledaños de Zorilla, pero la transformación no tiene vuelva atrás. A Enrique Morente, que empezó conmigo, no le pasaban una por ser payo, y sin embargo, era un pedazo de artista.