Las versiones ‘player’ son más ligeras, a menudo microperforadas para favorecer la transpiración y con tejidos livianos, mientras que las ‘replicas’ tienen un corte ancho y usan materiales más duraderos. Antes habían lucido Bizkaia en la ropa de entrenamiento y en las equipaciones de las categorías inferiores después de firmar un contrato con el Gobierno vasco a cambio de seis millones de euros.