Dado el diverso ADN de su selección, en Francia se dijo que los triunfos de 1998 y 2018 habían generado una identidad nacional unificada bajo la llamada «generación BBB», camisetas de alemania donde Zinedine Zidane Zizou (francés con ascendencia argelina) en 1998 o Kylian Mbappé (francés de ascendencia argelina-camerunés) en 2018 eran casi una especie de héroes nacionales símbolos de la convivencia social en un país donde el resorte del racismo y las inercias de su pasado colonialista siguen presentes en considerables sectores de la población.